En respuesta a las declaraciones expresadas por el presidente de la confederación de empresarios de la ciudad, José Reyes, sobre la difícil situación que atraviesa el comercio en Melilla.
06.08.2019
En la Consejería de Economía y Hacienda, tuvo lugar el pasado día 5 una reunión del consejero, Julio Liarte, con los representantes de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) con el objetivo de escuchar las preocupaciones y reivindicaciones de los empresarios de la ciudad.
En esta reunión participaron, además de Julio Liarte, como consejero y presidente de Proyecto Melilla, el vicepresidente de la sociedad pública, Emilio Guerra y la gerente, Carolina Gorgé. Por parte de los empresarios, asistió el presidente de la CEME, José Reyes, acompañado por José Antonio Ramos y Francisca Serón.
Esta reunión se considera como una primera toma de contacto con las asociaciones empresariales, con la intención de que no sea una acción aislada, sino la tónica permanente en el desarrollo de las relaciones político-empresariales de la ciudad.
Los asuntos tratados en esta ocasión han sido muy variados. Entre otros, se ha abordado la posibilidad de estudiar una reducción del IPSI de importación para tratar de unificarlo; la posibilidad de estudiar la unificación para todos los trabajadores de las bonificaciones de la Seguridad Social y pluses de residencia; se ha planeado también hacer primar en los procedimientos de contratación pública a aquellas empresas que presenten el sello Melilla Calidad o cualquier otro certificado de calidad reconocido; además de valorar la implantación de la directiva europea sobre la división de grandes contratos por lotes con el objetivo de favorecer la participación de las pequeñas y medianas empresas en los proyectos que supongan una gran inversión pública.
Además de los anteriores asuntos, se ha abordado la posibilidad de un mayor control de la economía sumergida de la ciudad, el estudio de la disminución de los costes de transporte hacia la península para los empresarios de la ciudad, para que no pierdan competitividad y la seguridad de las instalaciones en los polígonos industriales, todo ello con el objetivo de mejorar la situación del comercio local.
