“Bachakumbé” nace de la unión de dos palabras, “bachata” y “kumbia”, y del espíritu emprendedor de una pareja, Juan José y Belén, que tras pasar varios años trabajando en distintas ciudades, decidieron volver a Melilla. Una vez aquí, se establecieron en el Centro Vivero de Empresas, inaugurando hace ya dos años una escuela de ritmos latinos.
Nos hemos reunido con Juan José Martín Alcántara para compartir con nosotros, además de su experiencia como emprendedor, su paso por el Centro Vivero de Empresas.
En principio, nos interesaría conocer cómo surge la idea de crear en Melilla una escuela de ritmos latinos
Desde un principio quisimos hacer de nuestra pasión, nuestra profesión. Para ello nos formamos como profesores de “Baile de Salón” en distintos centros de Sevilla, Barcelona y Madrid, donde además de adquirir las titulaciones oficiales, obtuvimos una gran experiencia impartiendo clases de salsa, bachata y tango. A pesar de tener bastante trabajo, sobre todo en la ciudad hispalense, y ante la ausencia de escuelas oficiales de bailes de salón en nuestra ciudad, decidimos apostar por Melilla e inaugurar una escuela de baile especializada en ritmos latinos. En realidad fue una apuesta personal por nuestra ciudad.
Aunque el trabajo no nos faltaba fuera, nos planteamos la posibilidad de ofrecer una actividad como la nuestra a la gente de aquí, aunque sabíamos que no iba a ser una tarea fácil.
¿Qué te animó a emprender?
Como te he comentado anteriormente, la nuestra fue una apuesta por la ciudad, ya que cuando decidimos instalarnos en Melilla, no nos faltaba trabajo fuera. Aun así, y ante la limitación de actividades relacionadas con el baile, decidimos emprender nuestra aventura en Melilla, ya que sabíamos que podríamos ser la clave para ofrecer algo nuevo en nuestra ciudad.
¿Qué cualidades crees que debe tener un emprendedor?
La principal cualidad que debe tener una persona que quiera emprender es creer en su proyecto y la disposición al esfuerzo.
¿Cuál es el mayor obstáculo que te has encontrado a la hora de emprender?
El mayor obstáculo que hemos encontrado es que es muy difícil vivir de la cultura en nuestra ciudad sin contar con el apoyo de la Administración.
Por otro lado, la crisis sanitaria actual no facilita las cosas, sobre todo en el desarrollo de una actividad como la nuestra en la que el contacto es continuo. Por ello, desde el primer momento, establecimos un protocolo que cumplimos escrupulosamente y que nos ha llevado a no tener ningún problema en este sentido. Desde que decidimos abrir, lo hicimos con el convencimiento de ser consecuentes y adoptamos todas las medidas posibles: prohibición de las rotaciones, de forma que todo el mundo baila siempre con la misma pareja, disminución del aforo, uso de mascarillas y todas las medidas que estuviesen a nuestro alcance para tratar de mejorar esta situación. Pero la verdad es que la situación actual está afectando mucho a nuestro sector.
¿Y la mayor ayuda?
La mayor ayuda ha venido dada por el apoyo de mi familia y amigos, así como de Proyecto Melilla, por facilitarnos el camino para poder emprender nuestra actividad y darnos a conocer a todos los melillenses.
¿Cómo conociste el proyecto Centro Vivero de Empresas?
Después de buscar muchos locales sin éxito, un familiar nos habló del Centro Vivero de Empresas y de su labor de apoyo a los emprendedores.
¿Crees que el proyecto Centro Vivero de Empresas es una oportunidad para los emprendedores de la ciudad?
Sí, es una gran oportunidad para empezar el camino, para las empresas con recursos limitados.
¿Qué supone para tu negocio formar parte del Centro Vivero de Empresas?
Lo supone todo, ya que sin la oportunidad que nos han brindado desde Proyecto Melilla, no hubiéramos podido emprender nuestra actividad, ya que es muy difícil encontrar un lugar donde desarrollarla y poder seguir luchando por mantenerla.
Además, formar parte de un vivero de empresas supone compartir espacios con empresas que se encuentran en tu misma situación, son empresas de nueva creación que buscan consolidarse.
De los servicios prestados por el Centro Vivero de Empresas, ¿cuál es el que más valoras?
La utilización de local, ya que para el desarrollo de nuestra actividad es muy difícil encontrar un espacio como el que nos proporciona el Centro Vivero de Empresas y a buen precio. El nuestro es un local espacioso, abierto y con una localización que nos permite realizar nuestra actividad sin molestar a nadie. Además, cuenta con una muy buena ventilación y eso es muy importante, sobre todo en estos tiempos de crisis sanitaria, sin olvidar las facilidades de aparcamiento. Pero, sin duda, lo más relevante es el precio.
¿Cómo afrontas el futuro fuera de los espacios del Centro Vivero de Empresas?
Ahora con esta situación que estamos atravesando con la crisis económica que estamos viviendo, es muy difícil afrontar el futuro de la empresa fuera de los Viveros de Empresa.
